Guepardo tanzano (Acinonyx jubatus raineyi)

El guepardo de Tanzania, catalogado científicamente como Acinonyx jubatus raineyi y también conocida como guepardo del África oriental, es la especie más antigua de todas las subespecies de guepardos.

Acinonyx jubatus raineyi: El guepardo tanzano.

Características

Este guepardo africano tiene un pelaje pálido que va desde el bronceado hasta un color blanco amarillento, mucho más claro que el guepardo del nordeste.

Asimismo, tienen manchas negras por todas partes, a excepción de sus vientres blancos. En realidad, estas manchas son a veces tan grandes que comienzan a fusionarse hacia el final de la cola para formar anillos oscuros seguidos de un mechón blanco en la punta de la cola.

Chita corriendo (Acinonyx jubatus raineyi)

El guepardo denominado Acinonyx jubatus raineyi pesa entre 40 y 60 kg con entre 200 y 220 cm de longitud, el doble que el resto de guepardos. A pesar de esto, los guepardos de Tanzania todavía tienen una estructura más delgada que otras subespecies con las que convive.

Una de las características más icónicas del guepardo de Tanzania son las oscuras marcas de lágrimas negras que van desde el rabillo del ojo hasta la boca. De hecho, estas lágrimas no tienen solo un componente visual, sino que juegan un papel vital para todo guepardo.

En realidad, ayudan a reflejar el resplandor del sol cuando cazan durante el día. Del mismo modo, estas marcas actúan como las miras de un rifle, para ayudar al guepardo a apuntar y mantenerse enfocado en la presa que está cazando.

Los arqueólogos encontraron restos de un guepardo en los lechos inferiores del desfiladero de Olduvai, en el norte de Tanzania, que datan de hace unos millones de años. Por esta razón, la especie de guepardo Acinonyx jubatus raineyi es considerada la especie más antigua de guepardo.

Hábitat

Como su nombre indica, la especie Acinonyx jubatus raineyi o guepardo tanzano es endémica de África Oriental.

Su hábitat y nicho ecológico incluye grandes sabanas, pastizales, campos abiertos y estepas. Es por ello que entre 500 y 1000 guepardos tanzanos salvajes viven actualmente en el Parque Nacional Serengueti, concretamente en Namiri Plains. También, Del mismo modo un gran número de alrededor de 300 guepardos se pueden encontrar en Kenia, en la reserva de Maasai Mara.

Chita hembra de Acinonyx jubatus raineyi: El guepardo tanzano.

Aunque los hábitats mencionados anteriormente engloban la mayor cantidad de guepardos africanos orientales, existen pequeñas poblaciones en Tanzania, Kenia, Uganda y Somalia.

La especie del denominado Acinonyx jubatus raineyi es muy territorial. Sin embargo, estos territorios son habitualmente traspasados por machos y hembras en épocas de celo para buscar la reproducción.

El tamaño del territorio también depende de los recursos disponibles. Por eso, dependiendo del hábitat, el tamaño del territorio de un macho puede variar mucho de 37 a 160 km2.

Y, en términos de socialización, las hembras tienden a vivir vidas solitarias mientras que los machos forman grupos conocidos como coaliciones. Aún así, estas coaliciones no siempre están formadas por hermanos de la misma camada, por lo que en ocasiones los machos se unirán a otras coaliciones.

De hecho, en el Serengueti, se encontró que el 41% de los machos adultos eran solitarios, el 40% vivían en parejas y el 19% vivían en tríos.

Alimentación y caza

La principal fuente de alimento de los guepardos de Tanzania son los antílopes, siendo sus favoritos la gacela de Thomson y las gacelas de Grant. En realidad, la gacela de Thompson a menudo se encuentra pastando en las sabanas y campos abiertos del ecosistema del Serengueti, por lo que los guepardos pueden perseguir y atraparles a gran velocidad.

Chita hembra de la subespecie de guepardo Acinonyx jubatus raineyi

También, si existe una coalición, el grupo de guepardos son capaces de atacar y derribar animales mucho más grandes como impalas, ñus y antílopes topi. Sin embargo, las hembras de guepardo solteras tienden a preferir los antílopes más pequeños ya que con esto sacian su hambre. En ocasiones, los guepardos del Serengueti también cazan conejos y liebres si es necesario.

Para cazar, el guepardo de Tanzania es capaz de alcanzar una velocidad de 100 kilómetros por hora en apenas cinco segundos. Además, tienen una gran maniobrabilidad para girar ya que su larga cola actúa como un timón que les ayuda a ejecutar giros extremadamente rápidos. Seguidamente, destacan sus garras semi retráctiles, que les otorgan una gran tracción y agarre cuando corren a gran velocidad.

Finalmente, cabe remarcar que, a diferencia de la mayoría de guepardos, la especie Acinonyx jubatus raineyi es diurna. Por esta razón, ataca y busca presas con la salida del sol hasta bien entrado el mediodía.

Y, debido a la competitividad de depredadores de su hábitat, estos felinos devoran a su presa lo más rápido posible. Así, evitan conflictos y posibles enfrentamientos por la comida con otros animales como hienas, tigres o leones.

Cortejo

El cortejo del guepardo tanzano ocurre principalmente a finales de año, con la época más fría, aunque puede darse durante todo el año. En este tiempo, la hembra se muestra muy poco activa y tiende a pasar largas horas tumbada, dando vueltas sobre sí misma.

Además, ambos sexos impregnan zonas de su territorio con olores que vienen principalmente de las heces y la orina, para así poder encontrarse. Una vez se junta una pareja y ambos se corresponden, juegan durante horas o días mientras se frotan y se lamen sus rostros y cuerpos. Finalmente, el cortejo termina con el apareamiento, que suele repetirse en más de una ocasión al día para tratar de maximizar la fertilidad y el poco duradero vínculo de pareja.

Reproducción

La reproducción del guepardo africano oriental (Acinonyx jubatus raineyi) puede ocurrir durante todo el año ya que la hembra induce sus propios óvulos. Los guepardos hembra pueden reproducirse entre los 13 y los 16 meses de edad, con una edad promedio de madurez sexual entre los 21 y los 22 meses.

Aunque se reproducen durante todo el año, los nacimientos de los cachorros ocurren en mayor medida de enero a agosto. Así, tras unos tres meses de gestación, la hembra da a luz una camada con un gran número de cachorros, habitualmente de cuatro a ocho.

Cachorros de chita (Acinonyx jubatus raineyi)

Los cachorros de guepardo jubatus raineyi nacen ciegos y son extremadamente vulnerables. Por esta razón, permanecen ocultos en una cubierta espesa, cuevas, árboles o grutas durante el primer mes. En realidad, no pasan mucho tiempo en el mismo sitio ya que la madre mueve a sus cachorros cada pocos días para evitar ser detectados por algún depredador.

Madre de guepardo con cachorro en África (Acinonyx jubatus raineyi)

Los cachorros del guepardo de Tanzania se caracterizan por tener una melena al estilo «Mohicano» que desaparece a los pocos meses de nacer.

Del mismo modo que ocurre con el guepardo del Sáhara, los cachorros de guepardo son confundidos con los tejones de miel. Es por ello que en muchas situaciones los depredadores no se acercan a ellos, al confundirlo con otro animal y tener la creencia de poder ser atacados.

Los guepardos machos de África Oriental también son territoriales por lo que establecen sus territorios marcando sus territorios orinando en árboles o troncos. Además, la especie Acinonyx jubatus raineyi es muy agresiva defendiendo su territorio cuando algún intruso entra en él.

Igualmente, las áreas de distribución de la hembra del guepardo Tanzano pueden ser muy grandes. Con todo esto, las hembras de guepardo, especialmente las que cuidan de sus cachorros, tienen zonas que no pueden llegar a defender. Sin embargo, los machos eligen puntos en los que varias de las áreas de distribución de las hembras se superponen, creando un espacio mucho más pequeño. Así, pueden defenderse adecuadamente contra los intrusos y, a la vez,  maximizar la posibilidad de reproducción.

Las coaliciones harán todo lo posible para mantener territorios y encontrar hembras con las que aparearse.

Estado de conservación

El guepardo de Tanzania (Acinonyx jubatus raineyi) está clasificado como vulnerable de extinción. Aunque los guepardos de Tanzania tienen la segunda población más grande tras el guepardo sudafricano, se sigue considerando como especie en peligro.

Guepardo hembra de la subespecie Acinonyx jubatus raineyi

Las principales amenazas para el guepardo de Tanzania son los humanos y la caza furtiva para obtener su pelaje. También, se enfrentan a una progresiva pérdida de hábitat y a los depredadores más grandes del Serengueti como leones, leopardos, hienas y perros salvajes.

Finalmente, el gran problema de este tipo de guepardo es la gran mortalidad de los cachorros. De hecho, se estima que el porcentaje puede llegar hasta el 90% en lugares donde conviven con grandes depredadores.