León masái (Panthera leo massaica)
El león masái catalogado como Panthera leo massaica, también conocido como león de África Oriental, es una subespecie de león que habita en las regiones del este y sur de África. Este león recibe su denominación debido a su alta presencia en el hábitat del Masái Mara de Kenia.
Características
El panthera leo massaica se caracteriza por tener una melena relativamente corta en los machos y ser más delgados y altos que otras subespecies de leones. Por eso, además de tener un tamaño menor, posee un pelaje menos denso, unido a una complexión en general más fina.
Sin embargo, en términos generales, los leones de masái tienen características físicas similares a las de otros leones. Poseen una musculatura poderosa, garras afiladas y una dentición avanzada que les permite cazar y desgarrar la carne de sus presas.
En cuanto a sus sentidos, el león de masái tiene un olfato muy agudo, lo que le permite detectar presas a largas distancias. Además, su oído es excelente para detectar sonidos de baja frecuencia, como los gruñidos y rugidos de otros leones. Del mismo modo, es capaz de detectar el movimiento de roedores caminando entre la hierba.
Al contrario, su visión no es tan aguda como la de otros félidos. Aunque pueden ver a largas distancias, su agudeza visual disminuye en condiciones de poca luz. A pesar de esto, los leones masái tienen una vista excelente para detectar movimientos, lo que les permite cazar en grupo y coordinar sus ataques.
El panthera leo massaica es una pantera relativamente rápida, ya que puede alcanzar velocidades de hasta 50 kilómetros por hora en carreras cortas. Por ello, pueden perseguir y capturar presas en unos segundos.
Siguiendo con su capacidad de salto, aunque no son tan habilidosos en este aspecto, pueden saltar hasta 3 metros de altura. Así, pueden trepar árboles y acechar a sus presas desde arriba, pillandolas por sorpresa.
Por último, los leones de masái pueden vivir hasta 14 años en libertad y hasta 20 años en cautiverio, lo que los convierte en una especie relativamente longeva en comparación con otros animales salvajes.
Hábitat
El león de masái es nativo de las regiones del este y sur de África, concretamente en el Masái Mara de Kenia, Tanzania y Uganda. De hecho, en ocasiones puede coincidir con el leopardo sudafricano e incluso unir sus fuerzas en manadas.
Es más, el Panthera leo massaica vive en un nicho ecológico repleto de sabanas, bosques y zonas de arbustos. Por esta razón, puede esconderse fácilmente en la densa vegetación para acechar y cazar otros animales.
Al igual que el resto de panteras, los leones de masái son depredadores tope en su ecosistema. En consecuencia, no tienen depredadores naturales y controlan la población de presas, manteniendo el equilibrio en su ecosistema.
Seguidamente, la vida del león masái es muy social, por lo que vive en manadas de entre 5 y 30 leones.
Así, establecen una jerarquía en la que todos trabajan juntos para cazar y proteger sus crías en su territorio. Debido a la vida en manadas, la subespecie de Panthera leo massaica es altamente territorial y defiende su zona y su capacidad de caza con agresividad. Mientras que el macho dominante lidera la defensa del territorio y lucha contra otros machos, las hembras trabajan en equipo para cazar y cuidar de sus crías.
Alimentación y caza
La alimentación del león masái se basa principalmente en grandes herbívoros como gacelas, cebras, búfalos y ñus. Sin embargo, también pueden comer animales más grandes como elefantes y jirafas jóvenes de forma menos común.
Para ello, toda la manada del Panthera leo massaica se involucra en la caza. En consecuencia, al cazar en grupo, puede tener éxito en la captura de presas más grandes. Cabe destacar que estos panterinos son animales oportunistas y a menudo cazan durante la noche cuando los herbívoros están más vulnerables.
Siguiendo con la cantidad, el león masái es capaz de consumir hasta un 10-15% de su peso corporal en un solo día. Por esta razón, pasan varios días descansando y digiriendo su comida antes de necesitar cazar de nuevo.
Durante la caza, estos leones utilizan su fuerza y velocidad para abatir a la presa. Usualmente, los machos se encargan de la caza de animales más grandes, mientras que las hembras cazan animales más pequeños. De cualquier manera, una vez que la presa es capturada, utilizan sus fuertes mandíbulas para desgarrar la carne y alimentarse.
Celo y cortejo
El celo de las leonas masái no siempre es anual, siendo lo más habitual a los dos años con una duración de una semana. Durante este periodo, las hembras emiten feromonas y llaman la atención de los machos para indicar que están listas para aparearse.
Por otra parte, una vez que los machos detectan las feromonas de las hembras en celo, su comportamiento cambia y se vuelven más agresivos y territoriales. De hecho, los machos pueden llegar a luchar entre sí con otros machos de la manada para aparearse.
Seguidamente, una vez que se establece la pareja, los leones masái se involucran en un cortejo previo al apareamiento que puede durar varios días. Durante este periodo, la pareja se persigue, se frota y juega durante varios días en las que incluso pueden llegar a dormir juntos.
Finalmente, ocurre un apareamiento breve pero intenso, que puede durar desde unos pocos segundos hasta varios minutos. No obstante, durante este proceso, las hembras también pueden aparearse varias veces con diferentes machos para aumentar sus posibilidades de tener crías saludables.
Reproducción
Después del apareamiento, comienza la reproducción del león masái con un período de gestación que dura alrededor de 100 a 110 días. Aunque está embarazada, la hembra permanece en la manada. Sin embargo, días antes de dar a luz, se aleja para encontrar un lugar tranquilo y protegido.
Normalmente, la leona de Panthera leo massaica da a luz a una camada de 2 a 4 cachorros que son cuidados y protegidos por la manada entera.
Al nacer, los pequeños leones son ciegos y completamente dependientes de su madre durante los primeros meses de vida. Por esta razón, la madre amamanta a sus cachorros y vive junto a ellos hasta que tienen alrededor de seis semanas. En ese momento, comienzan a probar carne y otros alimentos.
Durante su vida, los cachorros pasan por varias etapas de crecimiento y aprenden habilidades vitales de caza y defensa de su manada. Sin embargo, cuando los leones de masái se convierten en adultos, los machos generalmente son expulsados de su grupo natal, mientras que las hembras pueden permanecer en la manada. En realidad, esta expulsión de los machos es un proceso natural que ayuda a evitar la endogamia en las manadas.
Por otro lado, las hembras suelen quedarse en la misma manada y establecen fuertes lazos sociales con sus hermanas. Y, a menudo, las hembras cazan y defienden su territorio juntas, ayudándose mutuamente en el cuidado de sus cachorros.
Estado de conservación
Aunque el león masái (Panthera leo massaica) no está en peligro de extinción, se considera una especie “vulnerable”.
Debido a la pérdida de su hábitat natural y la caza furtiva, la población de leones de masái se ha reducido significativamente en las últimas décadas. Es más, la pérdida de su hábitat natural se debe a la expansión agrícola, la urbanización y la minería.
Además, la caza furtiva de leones es considerada por los agricultores como una amenaza para su ganado. Finalmente, su valor en el mercado negro también ha contribuido al declive de la población de esta subespecie de león.
De cualquier manera, esta pantera está protegida por las leyes africanas que incluso realizan safaris por el Masái mara. Por esta razón, la población y cada uno de los ejemplares están monitorizados ante la posible caza furtiva.