Reproducción del león
La reproducción del león ocurre en cualquier época del año, con un pico de nacimientos durante la estación lluviosa, cuando hay más alimento disponible para las hembras preñadas y las crías recién nacidas.
Familia de leones blanco sudafricanos.
Aunque la mayoría de leones tienen una reproducción similar, hay algunas subespecies de leones que presentan características distintivas en cuanto a su reproducción.
Por ejemplo, el león del Atlas, tiene una temporada de apareamiento más corta que otras subespecies, y las hembras del león asiático, tienen ciclos de celo más cortos y son capaces de reproducirse durante todo el año.
Características
Celo de la leona
Durante el celo de la leona, su cuerpo libera feromonas que atraen a los machos de la manada. En realidad, la hembra está receptiva para el apareamiento durante solo unos días, por lo que los machos compiten por la oportunidad de copular con ella.
Pequeña leona con su madre de la subespecie masái.
No obstante, en la manada de leones, el macho dominante suele tener preferencia para aparearse con las hembras. Aunque, a veces, otros grandes machos intentan desafiar su posición. Por esta razón, se pueden producir peleas violentas entre los machos que pueden durar varias horas y dejar a los ejemplares heridos o en casos extremos, pueden llegar a morir.
Durante el celo, la leona tiene cambios de comportamiento en comparación con su estado habitual. En consecuencia, se vuelve más vocal y ruidosa, emitiendo sonidos de llamada para atraer a los machos hacia ella. Por último, si hay varios miembros en la manada, puede restregarse contra objetos o frotarse contra los machos en señal de receptividad.
Cortejo del léon
En general, una vez que la pareja se ha elegido, el proceso de cortejo del león es breve y sencillo. En la mayoría de los casos, el macho simplemente sigue a la hembra y la monta cuando ella está lista para aparearse. Sin embargo, antes del apareamiento, se puede observar un comportamiento de acercamiento, frotamientos y olfateo entre la pareja, que indica que se están preparando para la cópula.
Apareamiento del león
El apareamiento del león es un proceso breve que dura apenas unos pocos segundos. Antes de hacerlo, es común que la pareja se aleje del resto de la manada durante el apareamiento y pasen algunos días juntos en solitario.
Apareamiento del león de Nubia.
Durante el apareamiento, el macho monta a la hembra y la sujeta por el cuello o la nuca con sus dientes para asegurarse de que ella no se aleje.
Es más, la posición que adoptan durante la cópula es conocida como “en montura”, en la que el macho se sitúa encima de la hembra y la penetra desde atrás. Así, el macho introduce su órgano reproductivo en la hembra, con el objetivo de fecundar sus óvulos.
Bebé león del Congo abrazado por su padre.
Después, la pareja puede permanecer junta por algunos días más antes de separarse y regresar a la vida habitual de la manada. Durante este tiempo, la hembra suele rechazar los avances de otros leones, siendo el macho dominante el que la protege de posibles rivales.
La fecundación de la leona depende de la edad, la salud, la calidad del esperma y los óvulos. En general, se estima que la tasa de éxito en la fecundación del león oscila entre el 20% y el 30%, lo que significa que la mayoría de los intentos de apareamiento no resultan en una fecundación exitosa.
Gestación del león
Tras una fecundación con éxito, comienza la gestación del león que dura aproximadamente entre 100 y 110 días.
Debido a su estado, la hembra embarazada experimenta cambios físicos y comportamentales. A nivel visual, la leona muestra signos de hinchazón abdominal y se vuelve más solitaria, manteniendo distancia con la manada. No obstante, no se aleja del territorio del grupo, por lo que la manada se vuelca en proteger y cuidar a la hembra embarazada, permitiéndole descansar y proporcionándole alimentos.
Cabe destacar que el macho que ha fecundado a la hembra no suele hacer nada especial durante el periodo de gestación. En consecuencia, sigue con su papel principal en el grupo, protegiendo y patrullando el territorio para mantener a salvo a su familia.
Cachorros de león de Katanga con su padre.
Nacimiento del león
El nacimiento del león es un proceso de alrededor de una hora que suele ocurrir durante la noche, en un lugar seguro y tranquilo que la hembra elige para dar a luz.
Leones recién nacidos de la subespecie de Atlas o Berbería.
Durante el parto, la leona puede tener contracciones y empujar durante varios minutos hasta que el primer cachorro sale del útero.
Por lo general, la reproducción del león tiene camadas de entre una y seis crías, siendo dos o tres cachorros el número más común. Al nacer, los cachorros suelen pesar alrededor de 1,5 a 2 kg y tienen un pelaje corto y suave, de color marrón grisáceo.
Igualmente, los pequeños leones recién nacidos son ciegos durante aproximadamente una semana, por lo que dependen completamente de su madre para sobrevivir.
León recién nacido
Durante las primeras semanas de vida, la leona se asegura de que el león recién nacido esté limpio y caliente.
Madre con su león blanco bebé sudafricano.
En consecuencia, pasa todo el día con ellos mientras los alimenta con su leche y los protege de posibles amenazas. Este es un momento clave en la reproducción del león, ya que los cachorros son muy vulnerables e incluso un enfriamiento podría ser fatal para su salud.
Como el resto de las panteras, los leones recién nacidos comienzan a interactuar con sus hermanos y con su madre desde el nacimiento.
Por eso, a medida que van creciendo, los cachorros se vuelven más activos y curiosos. Por esta razón, exploran su entorno mientras juegan entre ellos y los adultos, adquiriendo además las habilidades motrices principales.
Pequeño león con su madre de la subespecie de león africano occidental.
Crecimiento del león
El crecimiento del león es muy rápido durante los primeros meses de vida, doblando su tamaño en tan solo unas pocas semanas.
Leones recién nacidos con su madre de la subespecie asiática.
Después de una semana de vida, comienzan a abrir los ojos y a moverse con mayor facilidad, lo que les permite explorar y jugar más allá del refugio de su madre. Seguidamente, a los dos meses de edad, los pequeños leones ya pueden caminar y correr con cierta habilidad, por lo que se vuelven más independientes.
Así, con tan solo seis meses de edad, los cachorros de león son lo suficientemente grandes como para participar en la caza. En consecuencia, se unen a la manada en la búsqueda de comida como un miembro más.
Familia de leones masáis.
Durante su primer año de vida, los cachorros de león experimentan un rápido crecimiento y aprenden habilidades importantes de caza y supervivencia. A medida que los leones van creciendo, en comparación las hembras se vuelven más pequeñas y ágiles, mientras que los machos se vuelven más grandes y poderosos.
Por último, los leones alcanzan la madurez sexual entre los 2 y 3 años de edad, momento en el que comienzan a buscar parejas para aparearse y formar sus propias manadas. En resumen, el crecimiento del león está marcado por un rápido desarrollo temprano y una transición gradual a la madurez sexual y la vida adulta.
Independencia del león
La independencia del león es un proceso que comienza alrededor de los 6 meses de edad y que culmina en la madurez sexual. Durante este tiempo, los cachorros de león se vuelven cada vez más independientes de su madre y comienzan a aprender las habilidades necesarias para sobrevivir en la vida salvaje.
Manada y familia de leones de Nubia con su pequeño león.
Como consecuencia de la vida en manada, el momento de la madurez es el momento de la reproducción del león en que se quedan o se marchan del grupo. Con todo esto, las hembras jóvenes a menudo se quedan en la manada familiar y, en algunos casos, pueden asumir roles de liderazgo una vez que las hembras mayores fallecen. Al contrario, los machos jóvenes, son expulsados de la manada por los machos adultos y deben establecerse por su cuenta.